domingo, 21 de junio de 2015

REFLEXIÓN DE EL EXTRANJERO

La visión que cada persona tiene sobre si misma esta relacionada con su existencia, con lo que a diario afronta es decir, su modo de vivir y actuar frente a los demás y que de alguna manera se refleja en profundos pensamientos e ideologías que caracterizan la espiritualidad de cada quien.
Basándonos en esto decimos que como humanos le buscamos el significado a la manera del porque existimos e intentamos a cada instante vincularnos con las diversas manifestaciones que más adelante lo explicaran. Siempre habrá razones que demostraran la psicología del hombre y que harán de este alguien con infinita experiencia y con ganas de instaurar sus propósitos frente a la vida; todo fundamentado en su origen y fin.
Naturalmente se puede cuestionar la idea que algunos  tienen del pensar para la conciencia y la salud mental del hombre, donde la mayoría se posiciona a través de las circunstancias que lo acarrean y que conducen  a una vida absurda describiendo a una mente incapaz de participar en emociones y pasiones ya que de alguna forma le resulta inútil en la vida, incluso esta se muestra marcada por una agria independencia del mundo exterior que tacha la moral. Indudablemente en el interior de una persona así, no es posible  encontrar una relación de racionalismo y sensibilidad humana; y mucho menos alguien puede adentrarse  en el corazón de dicho sujeto ya que simplemente este no existe. Pero, ¿Cómo se puede vivir así? Esto es algo que demorara tiempo responder y que simplemente se le deja a esas personas marcadas por la falta de valores y la indiferencia de comportarse tal y como son sin importarle el resto estando acorde a reacciones voluntarias que solo traen consecuencias, es decir decisiones que están fuera de la realidad circundante y sobre todo del reflejo de responsabilidades como esencia de lo bueno que no determinan el para donde se va ni lo que se quiere lograr.
Por otra parte abarcamos el termino cotidianidad como el hecho de realizar siempre lo mismo, lo que en el plano de una vida normal supone o se centra en un proceso de insensibilidad e incapacidad para actuar frente a algo nuevo y diferente que de algún modo podría cambiar la manera de actuar y serle atractivo a un nuevo reconocimiento. Esto resulta contradictorio a buena ética e inmediatamente se postula a una vida monótona y separada de todos los problemas metafísicos que acarrean la hombre. Aunque el verdadero problema radica en no tener una idea firme frente a las cosas y no ser capaz de establecerle un sentido a la realidad y saber interpretar todo lo que presenta dicha realidad cotidiana.

Aunque cada hombre tiene la libertad de elegir de acuerdo a su voluntad lo que quiere, no debe estar atado a dicho liderazgo puesto que  algunas veces la conciencia y las correctas decisiones que creemos tomar fallan y el conocimiento se aleja de cada quien, lo que no permite que el ser haga de la libertad lo que quiere sino que esta haga de el muchas cosas y es así como muchas veces la conciencia se revela y se vuelve una revelación de la muerte o por lo menos un motivo constante de esta.